Señora mayor de 70 años la diagnostican positivo por Covid-19 y ni una Tylenol le llevaron a casa
Redacción La Verdad Panamá
Los equipos de respuesta rápida y de trazabilidad por alguna razón que desconocemos, bajaron la velocidad a un kilometraje que pone en riesgo de muerte a muchos panameños que son diagnosticados con el Covid-19 y que se quedan esperando por una atención eficaz y digna.
Este es el caso de una señora mayor de 70 años, residente en el distrito de Arraiján a quien desde que le hicieron el examen y la diagnosticaron positiva nunca le entregaron un kit, el oxímetro, ni una Tylenol. Lo que sí lograron llevar con esfuerzo fue una bolsa de comida.
¿Es posible que ocurra esto con una ciudadana que también sufre de hipertensión?
“Si no fuera por nosotros mi mamá se hubiera muerto”, exclamó indignada la hija, quien también fue diagnosticada positivo y cuyo padre perdió la vida por el coronavirus. Una tragedia familiar con la que tiene que lidiar con mucha fe y fortaleza para evitar otro episodio de llanto y dolor por su señora madre.
La desatención y ausencia de respuesta rápida igual la vivió la hija. Relata que cuando la diagnosticaron positivo de Covid-19, ese mismo día llamó al 169 para que procedieran a su registro para notificar en su trabajo y cumplir con el protocolo de cuarentena. La mujer ya traumatizada por la noticia, recibe una llamada del Centro de Salud de Nuevo Chorrillo, donde una funcionaria le dice que acababan de recibir la información (el viernes 19), le pregunta por los síntomas, pero seguidamente le advierte que ellos cierran a las tres de la tarde y que no abren hasta el próximo lunes a las siete de la mañana.
La paciente le informa que tuvo un cuadro de diarrea en la mañana a lo que le responden del Centro de Salud que el lunes es que ellos le harán llegar una Enterogermina para que se la tome. “Le dije a la mujer, no es tu culpa pero por eso es que la gente en este país se está muriendo porque ni siquiera una Tylenol, porque quien no tiene para comprarse sus medicamentos se muere. No lo digo por mi porque gracias a Dios puedo pagarlos”, expresó.
“Como es posible que el Centro de Salud no trabaje los fines de semana. El sistema es malísimo, no es un sistema automático ni diligente que actúa con inmediatez. Aún tiene el descaro de decirme que si me siento muy mal que llame al 911; sin embargo, cuando llamas no hay ambulancias y al final te mueres”, concluyó indignada esta ciudadana que libra dos batallas por la vida, la suya y la de su madre.