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Población de pacientes  con Alzheimer  en  completo abandono

La   inexistencia de cifras de  enfermos  y la falta de   una calidad de  atención   en salud, refleja  el estado  de abandono en el que se encuentran los pacientes  de Alzheimer  en  Panamá, según  lo expresa Ingrid  Wellington presidenta de   la  Asociación de Apoyo a  los  Familiares  de  Pacientes  con esta  y otras enfermedades  demenciales.

La señora  Wellington indicó que  ni el  Ministerio de  Salud  ni la Caja de  Seguro Social, llevan  una  estadística de las personas  que en Panamá  padecen  esta enfermedad. “He conocido  un aproximado  de 500 personas  con demencia, pero  estoy  segura  que esa  no es la cifra ya que hay  muchas que aun teniendo  diagnóstico no se acercan a la  asociación  por pena, estigma y miedo  a ser  discriminados  por la sociedad”.

La Asociación  de  Apoyo a los  Familiares  de Pacientes  de  Alzheimer  en su  preocupación por  lograr  una  mejor calidad de  vida  y  de atención  en salud  a  esta población vulnerable, ha  tendido puentes  al Ministerio de  Salud, Caja de  Seguro Social, centros de  salud  y a los hospitales privados del país  para que  se  unan en una campaña  que ayude  a la creación de  un  censo  que les permita llegar a las  familias.

Uno de los principales problemas, señaló la  presidenta  de AFAPADEA,  es la falta de medicamentos para  paliar la  enfermedad, al punto que los  familiares  deben  comprarlos porque  generalmente no  hay  en la  Caja de  Seguro  Social.

El tema de  los  cuidadores  o personal  especializado para atender  a  los  pacientes  de  Alzheimer  es otro  desafío  que enfrentan los  familiares  en el aspecto  económico. Explica  Ingrid Wellington  que en Panamá  esto ha sido  un  bingo con la pandemia porque  cada  cita  virtual  tiene un costo de 50 dólares  y  una  visita  domiciliaria  de  un geriatra  representa  150 dólares, cifra que se aleja de la posibilidad de  muchos.

Los cuidadores  formales  con  salarios  están  entre 600  y 1,000  dólares  por mes y los  cuidadores informales (sin  salario-familiares)  en su  gran mayoría  con  contratos  suspendidos  han tenido  que cuidar  ellos mismos  a  sus familiares  actualmente.

Indicó Wellington que la  Asociación de Apoyo a los Familiares de Pacientes con Alzheimer y Otras Enfermedades Demenciales data desde 1995, sin embargo, nadie la conoce sino a raíz que estoy al frente ya que anteriormente los fundadores en su mayoría adultos mayor no hacían tantas actividades. Eso sin contar que no habían solicitado al MINSA y DGI las respectivas resoluciones.

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