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Alto costo de la vida sigue ahogando a los panameños de bajos ingresos

Por: Elizabeth Córdoba / Redacción La  Verdad Panamá 

Cada quincena que pasa los panameños sufren  el golpe  del alto costo de la vida al realizar sus compras  en los diferentes supermercados del país. La Canasta Básica Familiar mantiene un precio  de 297.61 dólares y un mínimo de 251.92 dólares, según informa la Autoridad de Protección al Consumidor y Defensa de la Competencia (Acodeco).

Un informe presentado por el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), señala  que La canasta básica familiar ha tenido un incremento  en los  últimos 12 años  de B/. 114.96, teniendo en cuenta que en cada hogar panameño, la familia puede  estar conformada por más de cuatro personas. Sin embargo, el salario mínimo en Panamá de aproximadamente 584.43 dólares mensuales  no ayuda,  es muy bajo y sumado a  las deducciones y pagos de los servicios básicos con dificultad se logra tener una buena alimentación. 

La Verdad Panamá realizó un  sondeo  para  percibir la opinión de algunas las personas que hoy sobreviven, como dicen muchas, porque el desempleo, las decenas de miles de panameños con salarios suspendidos y otros  con jornadas  reducidas  producto de la pandemia, definitivamente que los coloca en una situación  de vulnerabilidad  extrema y con pocas  opciones de alimentarse dignamente.

Argelis Quintero: vive con sus tres hijos y su esposo. Menciona que con el salario de ellos dos y los gastos de los niños se le han complicado las cosas ya que ni siquiera puede aplicar la ley de la sobrevivencia sino el que más necesidades logra aguantar es el que sobrevive, teniendo en cuenta todos los recursos que tiene Panamá.

Yaxuri Barahona:  Comprando lo necesario para ella, su esposo y sus dos hijos invierte un total de  250.00 dólares,  sin agregar los gastos de la luz, agua, y servicios de internet que ha tenido que recurrir a ellos por el tema de las clases virtuales.

Yamirelys Blanchard: aseguró que con el salario mínimo tan bajo los insumos necesarios han sido reducidos y la alimentación de sus dos hijos ha tenido que bajarla para que puedan alcanzarle  hasta  otra la otra quincena. Un   cuadro sencillamente desesperante máxime  cuando hablamos  de niños  que  requieren de una  buena alimentación.

Roselvis Medrano: es otra ciudadana que se queja del alto costo de la vida.  No hace mucho dio a luz a su segunda hija y no pensó que la leche, los pampers hayan subido tanto en los últimos cinco años. “Esto es preocupante los precios que suben en los  supermercados  nadie los detiene”, manifestó.

Gabriela González:  tampoco  la  tiene  nada fácil, cuenta  que  todas las quincenas  que  va  al supermercado, se percata  de que seis artículos  o más,  han subido de precio y que lastimosamente  tiene  que  optar por el más barato. “Nosotros  como  panameños no nos estamos alimentando como  debe ser  por falta de recursos, porque  hay que tener  prioridades  al momento de  comer”, exclamó  impotente la señora Gabriela.

El escenario es caótico para muchos panameños que a duras penas pueden sobrevivir con el bono solidario de 120 dólares, que  evidentemente no cubre  el costo de  la canasta  básica familiar. Con el retorno a las clases semipresenciales la situación se tornará más crítica por los gastos en los que tendrán que incurrir los padres de familia.

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