El relajamiento y el rebrote, manipulados por COVID-19

Por Roberto Rolando RODRIGUEZ

Periodista

El Corona virus-19 “no se va”. Hay que comprenderlo desde esa opinión “no se va”. La Organización Mundial de Salud lo advierte: “el virus es el enemigo público número uno de la población mundial”. No nos están inculcando miedo, es la realidad inteligente.

La OMS sugiere que hay que dar “un paso atrás” y recalcular debido a que es una enfermedad “grave no leve”. Y muchos en el mundo, e igual en Panamá, no lo creen así.

Varios países que experimentaron medidas invasivas al ciudadano para controlar al nuevo corona virus, ahora se disponen levantar necesariamente esas disposiciones que representan un riesgo en general e imponen la practica constante de hábitos en la conducta higiénica personal y la cultura del distanciamiento social. En este punto hay quienes defienden que se trata de un derecho individual vulnerado. La salud es colectiva también, o no…

Estamos de doble filos. Desde el punto de vista que relajar o levantar las medidas de confinamiento implica prepararse para nuevos brotes de Covid-19. No lo duden y así coincide un estudio de la Universidad de Panamá dado a conocer en las últimas horas.

Las noticias vienen rápido. En algunos países, los rebrotes ya se dan coincidentemente con el levantamiento del confinamiento aunque de forma “despacio y paulatinamente” a objeto de la búsqueda de una clave para proteger vidas y estimular la economía.

El mundo está en serios aprietos. El miedo asoma sus tentáculos y puede influenciar los débiles impulsos humanos en momentos difíciles en que reclama salud y mejor calidad de vida.

Corona virus -19, desde que migró de Wuhan, China a finales de noviembre del 2019, ha matado a ricos y pobres, en una cantidad mayor a 250,000 seres humanos del planeta Tierra, y según los científicos no pretende abandonar su labor de contaminación infecciosa sino hay una vacuna efectiva. Una apuesta  que pronto la inteligencia humana ganará.